El que fuera fundador del, ahora, Club Deportivo Astudillo, ha recibido esta tarde, a título póstumo, un sentido homenaje en el campo de fútbol La Joya, donde tantas horas pasó. Salesiano sacerdote, vino al colegio que la orden tuvo aquí en Astudillo, involucrándose desde el principio con este deporte, viendo pasar varias generaciones de futbolistas por el equipo, siempre animando y acompañándolo allí donde le tocase jugar cada fin de semana.
Una placa con su nombre lo mantendrá vivo en el recuerdo.