Es importante conocer nuestro patrimonio desde pequeños, así lo respetaremos y preservaremos para las generaciones que nos sigan. Conociéndolo, lo valoraremos más y entenderemos mejor toda nuestra historia. Ha resultado muy entretenido y, creo, también divertido, porque después del recorrido y explicaciones, hemos rellenado unas fichas con cuestiones que habíamos visto en la visita, sopa de letras, crucigramas y fotos sorpresa con objetos "curiosos" que, para saber su nombre han tenido que involucrar a los lugareños en la propia visita.